El 26 de mayo de cada año Uruguay recuerda el día en que se llevó a cabo la Inauguración de la Biblioteca Pública en Montevideo.
La Biblioteca Pública de Uruguay también llamada Biblioteca Nacional de Uruguay, es una de las más antiguas del Uruguay la primera en ser inaugurada y abierta para todo el público. La Biblioteca Pública fue instala en los altos del fuerte de Montevideo lo que se conoce en la actualidad como Plaza Zabala, la inauguración se llevo a cabo el 21 de mayo de 1816.
A finales del año 1815 el sacerdote Dámaso Larrañaga sintió la necesidad que existiese en la ciudad una biblioteca que se encontrara dotada de libros la estuviese acta para recibir a todas aquellos amantes del estudio y la lectura. Este motivo conllevo que el sacerdote enviara una carta al cabildo donde proponía que fuese creado un espacio donde se pudiese suplir con interesantes libros la ausencia de maestros. En la carta que fue enviada Larrañaga había estipula que fuese creada una Biblioteca Pública para que todas las personas interesadas en aprender pudiesen asistir.
Al estar enterado José Artigas de la propuesta hecha por el sacerdote, también envió una carta al cabildo señalando el visto bueno de la propuesta de la creación de lo que sería la primera biblioteca en el país. Luego de ello al pasar unos meses, una donación de libros por parte de José Manuel Pérez castellano llegó a la ciudad y a escasos de unos días José Raimundo también había aportado una gran cantidad de libros para abastecer la nueva y primera biblioteca.
Finalmente la Biblioteca Pública fue inaugurada el 26 de mayo de 1816, a aproximadamente 5.000 volúmenes estaban disponibles en la biblioteca, pero en cuando llego la invasión brasileña los volúmenes se habían reducido a 2.000. Para el año 1938 la Biblioteca Pública paso a denominarse Biblioteca Nacional.
Durante la primera inauguración de la biblioteca en 1816 el sacerdote Larrañaga durante el acto había pronunciado las siguientes palabras: “La apertura de esta Biblioteca Pública, como una parte de vuestras fiestas, eleva este pueblo a un rango tan alto de gloria que tiene muy pocos ejemplares en la historia literaria de las naciones.”