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* El gobierno de la República Popular China considera a Taiwán como una de sus provincias desde su fundación en 1949, pero nunca ha llegado a tener control sobre la isla.
China, oficialmente «República Popular China», es un país ubicado en Asia Oriental. Su sistema político es de tipo unipartidista, gobernado por el Partido Comunista. China es el tercer país más extenso del planeta por superficie terrestre detrás de Rusia y Canadá. China limita al norte con Rusia y Mongolia; al noroeste con Kazajistán y Kirguistán; al oeste con Tayikistán y Afganistán; al suroeste con India, Nepal y Pakistán; al sur con Bután, Birmania (o Myanmar) y Laos; al sureste con Vietnam y el mar de China Oriental; al este con el mar Amarillo y el mar de China Oriental; y al noreste con Corea del Norte y el mar Amarillo. Es el país más poblado del mundo, con más de 1395 millones de habitantes. La capital de China es Pekín (también conocida como Beijing según la traducción oficial del hanyu pinyin), que sirve como sede central del gobierno y del Partido Comunista.
El nombre de China ha sido empleado por los europeos desde el siglo XVI en referencia a la nación asiática, pero no es una palabra que haya sido, o sea empleada por la propia gente china en referencia a su país. El primer registro del uso de «China» data de 1516 en el diario del explorador portugués Duarte Barbosa. El uso dado por Barbosa derivó de la palabra persa sasánida «Cin» o «Chīn» que a su vez deriva de «Cīna», un término usado en literatura del antiguo idioma sánscrito de la India durante el primer milenio antes de Cristo, en referencia a pueblos o tribus originarios de regiones en la actual China con amplios logros culturales. Diversas fuentes antiguas hindúes a partir del siglo V a. C. hacen uso del término «Cīna»; entre estas están el Artha-shastra, el Mahabharata, las Leyes de Manu, el Ramayana, así como algunas escrituras puranas a partir del siglo III d. C como el Kalika Purana. En el caso particular del Artha-shastra se describían «los tejídos de seda que se producían en Cīna» (traducción aproximada). El término en sánscrito podría haberse derivado fonéticamente del nombre de Qin, un antiguo Estado chino al borde occidental de la civilización china que existió desde el siglo IX a. C., que en el siglo III a. C. fundaría la dinastía Qin con la conquista y unificación de los territorios centrales de la actual China, así como el establecimiento del Primer Imperio. También pudo derivar del nombre de la dinastía Jin, un reino situado lo que actualmente es China central y meridional entre los años 722 a. C. y 212 a. C. en cuya última etapa histórica compitió con la dinastía Qin. Otro argumento convincente sobre el origen sánscrito-hindú del término «Cīna» se encuentra en un texto antiguo titulado Yelang shi zhuan; una colección de poemas épicos que describen la genealogía del clan Zina (Yelang) hacia un período que posiblemente se extiende hacia el año 500 a. C., así como la evolución de esa entidad política (Zina o Yelang) descrita por primera vez en el siglo III a. C., ubicada al sur del imperio Han. A partir del sánscrito-hindú derivaron otros términos para la misma región asiática. Los greco-romanos se referían a los pueblos chinos con el nombre Sinae y empleaban los prefijos Sino- y Sin- con sus habitantes.
El término Zhongguó (o Zhonghuá), que se traduce como «Estado central» o «Estados centrales», es el nombre latinizado empleado por los chinos para designar a su país. Ningún gobierno o sociedad china ha de hecho usado formalmente el término «China» para referirse a su nación, a sus territorios o sus habitantes; con la excepción del anteriormente mencionado clan Zina (o Yelang) y la entidad política con el mismo nombre. Históricamente, y mucho antes de la existencia de una noción de nación o Estado como existe hoy en día, se empleaban los nombres de las dinastías o de cada imperio reinante, y esto era confinado dentro de cada uno sus dominios; los cuales eran cambiantes con el pasar de los años y de los siglos, dependiendo de los derechos hereditarios, así como de las guerras y conquistas. Así era como se denominaban a los dominios feudales por ejemplo: dinastía Han, dinastía Song, dinastía Yuan, dinastía Ming, y dinastía Qing. De esta forma queda claro que «China» es un término no-chino empleado por una gran variedad de idiomas diferentes a los dialectos chinos. El nombre oficial del Estado moderno empleado por el mundo occidental desde 1949 es «República Popular de China», pero la correcta latinización es Zhōnghuá Rénmín Gònghéguó, cuya traducción más cercana sería «República Popular del Estado Central». El término Zhongguó se desarrolló bajo la antigua dinastía Zhou Occidental (1046 a. C. – 771 a. C.) en referencia a sus dominios feudales. Habría sido aplicado más tarde al área alrededor de Luoyi (actual Luoyang) durante el apogeo de la dinastía Zhou Oriental (770 a. C. – 256 a. C.) y luego a las provincias de la Llanura Central sobre la cuenca baja del río Amarillo, cuna histórica del la civilización china, antes de ser ocasionalmente empleado como sinónimo de la dinastía Qing, la última dinastía imperial de China que gobernó entre 1644 y 1912.